Te fuiste no sé a donde,
mamá me dijo que solo salías de casa
y que pronto regresarías
con muchas sorpresas para mí,
yo solo quería aprender
a dar mis primeros pasos
y que tú tomaras de mi mano.
No recuerdo tú voz diciéndome adiós,
no sabía que al alzar mi mano
te estaba despidiendo por mucho tiempo.
Solo estaba aprendiendo a decir papá,
creo que después olvidé esa palabra
y me quedé solo con mamá.
Un día me llamaste para preguntarme
cómo estaba, yo te dije muy bien,
a eso le agregué: "¿cuándo regresas papá? ",
El silencio de tú respuesta me hizo entender
que tenía que regresar sola a platicar
con las muñecas que me mandabas
y abrazarlas como si ellas fueran tú.
Mi mamá me tomaba muchas fotografías,
decía que eran para que tú supieras
lo grande que me ponía,
ella también me mostraba
tus fotografías, mas ninguna
de ellas me gustaba
porque en ninguna yo estaba.
Ya es diciembre, son diecisiete años
lejos de ti, son diecisiete años
mirando las estrellas desde el patio
de la casa, pidiéndole a ellas
que pasaras una navidad junto a mí.
No quería juguetes ni ropa lujosa,
solo necesitaba tú presencia
para contarte que hay un chico
en la esquina de la casa
que siempre me molesta
y quería que supiera que hay un hombre
al que espero con ansiedad para pasear
por toda esta gran ciudad.
Te separaste de mamá,
en realidad te separaste cuando te fuiste,
allá formaste otra familia,
alteraste tú dialecto
y aunque de mí no te has olvidado
debo decir que tú rostro no lo recuerdo.
Quería saber si te fuiste
pensando en regresar o en quedarte
para siempre, pensando
en olvidar a mamá, creyendo
que los sueños solo se viven
en otros países y que mi realidad
podía cambiar con la casa enorme
que construiste para que viviera
solo con mamá y su pena
de disfrutar por poco tiempo
de una familia, la que perdió
con la desesperación del feriado bancario.
No me hubiese importado
que se perdieran tus ahorros
si estuvieras con nosotros,
a pesar de la crisis
te endeudaste para irte,
toda tú fuerza laboral
la invertiste en donde migraste
y hoy regresas porque la crisis
de allá nuevamente te corre.
Pues bien, solo quería que sepas
que tú país, tú hija y la mujer
que siempre te amó aún te esperan.
Artículo: Tatiana Sandoval
Fotografía: Tatiana Sandoval
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