En dos ocasiones en el 2015 varias personas me preguntaron cuál era mi proyección política. Era el año en el que luchaba por la defensa de los límites de Huaquillas desde la política ciudadana. Aquellos creían que mi lucha era por hacer palestra política, ya que les intrigaba el hecho de que a futuro me postulara como candidata para una concejalía principal o para la Alcaldía de Huaquillas y les parecía “extraterrestre” que hubiera personas que lucharan incondicionalmente por un beneficio colectivo sin buscar nada a cambio ni en ese momento ni a futuro. Recuerdo tan perfectamente que a todos respondí por igual ante esa pregunta:
Yo me imagino en poco tiempo viviendo en algún lugar de la sierra (soy costeña, pero la sierra me encanta, es mi lugar favorito para vivir). De hecho, ya tenía en mente migrar a la sierra, sólo que postergué mis planes por la tarea que estaba emprendiendo en ese instante. El anhelo se cumplió, en septiembre de 2015 gracias a la ayuda de mi hermano Michael Sandoval Pizarro (+) comencé a vivir en Cuenca, y luego en diciembre de 2017 migré a Quito con mi capitalino. El amor no estaba en mis planes para esos tiempos, pero como la mayoría dice: “el amor llega cuando menos lo esperas” y a mí me llegó sin previo aviso.
Sigo. Yo me imagino corriendo, viviendo muchas aventuras en una bicicleta, haciendo fotografía, respirando el arte y la cultura por todos lados, acariciando las maravillas de la naturaleza, escribiendo todo el tiempo, leyéndole a la gente páginas de las experiencias adquiridas para motivarlas a vivir con toda adrenalina. Me imagino como lo que soy, y la realidad es mucho mejor. Siento que estoy logrando todo esto que soñaba. Empecé alquilando bicicletas en Cuenca que se facilitaban al público de manera gratuita y así inicié mis primeras aventuras por la sierra. Cada vez que podía alquilar una "bici" me proyectaba una ruta, y fue así como iba tomando los máximos riesgos de mi vida. Luego con esfuerzo logré reunir para comprarme mi primera “bici”, una económica que después fui transformando. Salía todas las mañanas a correr al “Parque de la Madre” de Cuenca, hasta que después se me vino a la mente comprarme un hula hula y volver a hacer lo que hacía de niña, bailar con este juguete. Más tarde me dejé inspirar por el yoga y me empeciné en hacer flexible a mi cuerpo, pues sentía que desde niña tenía ese potencial, pero no sé qué pasó que lo terminé abandonando hasta que volví a retomarlo a mis 25 años de edad.
Continuó escribiendo poemas para mi blog de “Versos Diarios” y hago fotografía de todas mis travesías. Aprovecho las redes sociales para transmitirles mis experiencias y disfruto cada segundo de la vida, pese a las cosas terribles que han pasado en mi familia, situaciones que jamás me proyecté y que jamás las he deseado, pues son parte de las pesadillas. No tuve ni tengo proyección política, lo único que tengo es proyección de seguir siendo lo que soy, una alma suelta que viaja por donde la lleven sus sueños y el tiempo que tenga para habitar en esta Tierra.
"Haz siempre lo que deseas hacer en el momento que lo decidas".
Artículo: Tatiana Sandoval
Fotografía: Patricio Vásquez & Mabel Cox
Comments