top of page
Foto del escritorTatiana Sandoval Pizarro

Treinta poemas no son treinta días para un beso

Pusilánime, casi anónimo,

tan fortuito; primigenio

del florilegio de treinta trovas;

registro de la intrepidez

de algo que no era un encuentro.

Un relato más que le faltara

a las mil y una noches;

más que la costumbre de las ficciones

fueron tres décadas sin argumentos

que no estaban preparadas

para aquel lacónico hecho.


Fue así tan sólo suyo mi primer beso

como la primera hipótesis

aunque no fuese la más pertinente,

como el primer experimento

aunque fallara en su intento.


Agudo, casi implícito en su contenido,

tan eterno, más que los vivos,

menos que los muertos;

incipiente en sus pronunciaciones,

puntero en la lista de espera,

demasiado efímero para ser efemérides,

pero extremadamente convincente

para conservarse pajizo entre mis obras.

Fueron trigésimas las tonadas,

segundos que contara

mucho antes de que llegara,

mucho después de que partiera.


Fue así él, el pródigo del ayer,

de mi primer y único beso.

Como el héroe de una epopeya,

como la espada de las batallas

que se ha quedado enterrada

en el campo de mis labios.


Apoltronado sobre una servilleta

luce autografiado con el carmín natural

que aún bruñera a mis treinta años

aquel primer beso que le diera,

aquel que hoy fuese mi primer

beso de regreso, sosegado desde

entonces en su proceso.


En las cuadrículas de mis labios

la silueta de los suyos se recuesta,

ellos beben de mi hálito hasta agotar

la lucidez de mis sesenta... y no sé,

no sé, no sé nada de él,

ya perdí la suma de mis años

y mi albedrío sabe que treinta poemas

no son treinta días para recuperarlo.


Fue así la enfermedad de su beso,

de mi primer beso, que ya tengo miedo

de despertar sin recordarlo,

pues aunque mi mente persista en olvidarlo,

su beso ya ha eclipsado mi memoria,

y sí, lo prefiero así antes de que ella

lo hubiese borrado; inútil sería su trabajo,

si bien fue el primero

y a pesar de que la lluvia de invierno

siga aquejando los prefijos y sufijos

de mis años, jamás negaré que usted

lo ha hecho y en el recuerdo

del sabor que me ha dejado

lo estoy escribiendo.

Artículo: Tatiana Sandoval

Fotografía: Mabel Cox


¡Muchas gracias por compartirme su tiempo! Si estos versos les gustaron y consideran que pueden gustarles a otros no dejen de compartirlos. ¡Sean felices siempre! 😃


8 visualizaciones0 comentarios

Entradas relacionadas

Ver todo

Comentarios


bottom of page