Confieso que me hubiese encantado ser bailarina profesional 🙆♀️💃, de niña bailaba mucho, pero no sé qué me pasó en la adolescencia que la timidez me ganó y dejé de lado el baile 🤔. Considero que todos pasamos por momentos en los que cambiamos o priorizamos ciertas actividades por otras, mientras nos vamos explorando en cada etapa, no obstante, el baile siempre ha estado conmigo de una u otra forma, sobre todo cuando estoy a solas (creo que a muchos nos sucede). Bailar para mí es viajar con mi mente y mi cuerpo a otro espacio sin dejar aquel en el que ahora me encuentro. A mis 25 años he retomado mis clases de baile. En estas clases soy mi propia maestra, me divierto, sigo ciertos pasos y otros son los que mi mente y mi cuerpo están preparando al ritmo de una canción. He retomado el baile con mucha seguridad y lo combino perfectamente con mis rutinas de ejercicios, la timidez desapareció, porque ahora sé que el baile siempre ha sido parte de mi naturaleza, por más que lo haya pretendido reprimir en cierto momento. Bailo a mi manera y si alguien algún día me ve y mis pasos le causan gracia, crean que a mí también me dan mucha más gracia 😁.
***Primera fotografía: Si mal no lo recuerdo bailé la canción "1,2,3" de la banda argentina de latin-pop "El Símbolo". Tendría entre seis y siete años, ¡qué difícil es recordarlo! 😆
***Segunda fotografía: No recuerdo para nada la canción que bailé, lo que sí estoy segura es que tendría nueve años de edad.
Artículo: Tatiana Sandoval
Fotografía: Anónima
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